lunes, 28 de enero de 2008

Pasista

Fueron interminables 15 días de ¿vacaciones?
Auto roto. Exilio en la chacra. Mucho cavar, mucho plantar, mucho reparar. La última semana, solo tres días con mis niños en la costa sin la madre, y posteriores 4 días más con ellos en casa. Los disfruté, pero no niego haber deseado encerrarlos en un corral con un bozal apretado más de una vez...
El sábado la madre tuvo una idea feliz: llevarlos a un corso pueblerino. Digo feliz y lo digo ahora. Porque cuando escuché la idea, mascullaba puteadas por lo bajo acordes con mi condicion de hombre ya mayor puesto en el brete de hacer lo que no desea... Parecía el perro de Pierrenodoyuna (Patán?)...
Y allí fuimos, a Capilla del Señor. Salvando las distancias el tema estaba organizado como en el Carnaval de Rio... Una calle, y distintos tipos de localidades: Populares de "dorapa", alquiler de sillas (para que me entiendan te dan la silla y la acomodas donde te venga en ganas), o el VIP, que consistía en alquilar una mesa a la vera del "Capillodromo", contando con el privilegio de una camarera que te traia los panchos, choripanes y cervezas... Por supuesto uno la va de hacendado acaudalado, así que una vez estacionado el 147, alquilé mesa.
Tomás de hombre araña, y Maite de Barbie version pampita morocha. La madre derrochando optimismo, y el que esto masculla resignado...
Repentinamente el recuerdo de mis carnavales de la infancia en Libertad con mis abuelos fueron retornando. La gente del pueblo, endomingada, que iba llegando. La guerra de espuma de los niños. El locutor pueblerino agradeciendo la presencia de gente de "¡Campaaanaaa!, ¡Pilaaarr! ¡Allá tenemos una familia de Areecoooo!"...
Atrás nuestro engalanado y planta de alpargata nueva contra un arbol, un gaucho veinteañero con facón de plata cruzado, miraba a las niñas con gesto varonil. No pude dejar de sonreir pensando en más de una amiga que le entraría a el con las mismas ganas que el le entraba a un choripan...
Mis niños corrian. Felices. La hija mujer con más desenfado, menos timidez, más felicidad...
Hasta que al fin comenzó el desfile de la comparsa. Bastante digna. Muy abrasileñada para mi gusto. Con abre alas, pasistas, una suerte de bahianas, portabanderas, mujeres y hombres viviendo su momento de gloria... Maite se abalanzaba a la calle ante cada chica con plumas, bailaba, daba vueltas en su traje blanco de Barbie. Temblaba de felicidad y protagonismo.
Dejen que les diga que era la más hermosa de todas las mujeres presentes. Y la más luminosa
Y así siguio la noche.
A la vuelta y mientras manejaba, no pude dejar de agradecer que en casa no se haga lo que yo deseo...

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Que manera de quejarse! Al final me voy a creer que es un viejo en serio. Me encanta el relato y la parte que dice :>>>La madre derrochando optimismo " es genial parece mi viejo cuando habla de mi mama.
Vió Brasil , al final lo que tiene que hacer es quedarse callado y obedecer a la patrona. Las mujeres siempre tenemos razon.

Dele besos de mi parte a la nena. Ve que las mujeres y mujercitas somos lo mejor.
Yo aunque no la conozca, se que Maite era sin duda las mas bonita de todos. y Ud. el que mejor se las pasó en el Carnaval de su pueblo.
Mari

EmmaPeel dijo...

Qué fiestón, Brasil!

le va a salir pasista la peque

me hizo acordar a los veranos en Lobería y la quema del rey momo en la principal

qué saudade

bienvenido

Roedor dijo...

Envidio su capacidad de hacer de una oportunidad que pintaba chusca toda una celebración de la alegría infantil.

La pendeja le salvó la tarde, en otras palabras: si no, se cortaba las venas con una galle de salvado, ¿no?

Anónimo dijo...

Fetivamente dulce Maria. Las mujeres mandan y los hombres nos quejamos. Totalmente de acuerdo: ¡si querida!

Emma: ¿Lobería? ¿La Dulce?

Roedor: Estimado amigo los niños me hacen apreciar cosas impensadas. No se si será bueno para ellos que yo sea su padre, pero se que para mi es bueno que ellos sean mis hijos

morgana dijo...

Uh... de haberlo sabido!
Mi hija iba a ir a CApilla, fue invitada infinidad de veces en este enero, pero me quedaba sin ella más tiempo del que puedo superar su ausencia.
No le digo que se perdió un fiesta así, porque muere (o me mata, que es lo más seguro).

Qué lindo eso de endomingarse,
qué pena que aquí se perdió todo eso.

Siga dejándose llevar por estos caminos.
Parece que la patrona sabe.

Saludos.

Anónimo dijo...

Aquí cerca estan los Carnavales de Cadiz que son muy famosos aunque sin el brillo brasilero o de Tenerife. Es el tipico Carnaval de chirigotas, todo la gente de Cadiz se disfraza , hay un pregonero (hace 2 anos fue Alejandro Sanz), y simplemente vas caminando por la ciudad con pescaito frito y cerveza y la gente se mete con los distintos grupetes disfrazados. No es un carnaval para ver sino para participar. Realmnente divertido segun con quien se vaya.
Mary

Cosima dijo...

que suerte que tenes quien no te deje sino seguir siendo flexible y exponiendote a que te pasen esas cosas.

Felicidades, sobre todo por la reinita del carnaval, que tantas alegrías te dará.

Anónimo dijo...

A las lectoras feminas que se deshacen en elogios sobre la patrona:

No siempre la acierta, pero siempre se hace lo que ella dice. Así que paren un poquito con las loas que el que vive con ella soy yo.

Como soy un caballero si acierta se lo reconozco, pero no hagan una cuestion de género tipo "al final lo que tiene que hacer es quedarse callado y obedecer a la patrona. Las mujeres siempre tenemos razon." o "Siga dejándose llevar por estos caminos.
Parece que la patrona sabe."

Anónimo dijo...

La mujeres siempre tenemos razon.
La patrona sabe.
Obedezca, Brasil y calladito

La mari

Anónimo dijo...

nada hay peor que el carnaval argentino. el carnaval es solo brasileño. sépanlo.

Anónimo dijo...

nada peor que el carnaval. punto.

de niña me gustaba apretar el pomo. de grande más.

saludos

Begoña