jueves, 28 de agosto de 2008

Un lujo

Apaleado por la discusión marital, el tipo se desploma en una silla en la cocina. Cansado de tomar carrera para volver a empezar y llevarse todas las vallas puestas. Resuella bronca y resentimiento. La copa de aceptable Finca el Portillo, y su perro preferido a sus pies le van devolviendo , sino tranquilidad, al menos una suerte de rutina...


Toma el remoto. Enciende y pasea, y de repente sonríe. Cree haberla visto en el SHA. Hay cosas que valen la pena, a pesar de todo

miércoles, 20 de agosto de 2008

Amelia


Su madre y su hermano le decían "negrita". Ningún otro ser humano hubiera salido indemne de nominarla así.


Su documento decía María Amelia. Sus amigos le decían Amelia.


Era brava y fría, pero tenaz, inteligente, avasalladora. Nutricia y guardiana. Pasados los 80 y mirándola quienes la conocíamos desde siempre, comprendíamos cabalmente el significado de "león hervíboro". Los nietos y bisnietos la habían dulcificado y transformado en una tierna anciana.


El cura se equivocó una y otra vez llamandola "María".


Yo la llamaba mamá.