miércoles, 3 de septiembre de 2008

SMS


Lamento infinitamente no saber linkear. La imágen de lo que sigue me surgió leyendo un post del amigo Roedor en su blog.


¿quien podría hoy escribir un texto como el que sigue?

"

¿Encontraría a la Maga? Tantas veces me había bastado asomarme, viniendo por la rue de Seine, al arco que da al Quai de Conti, y apenas la luz de ceniza y olivo que flota sobre el río me dejaba distinguir las formas, ya su silueta delgada se inscribía en el Pont des Arts, a veces andando de un lado a otro, a veces detenida en el pretil de hierro, inclinada sobre el agua.


Y era tan natural cruzar la calle, subir los peldaños del puente, entrar en su delgada cintura y acercarme a la Maga que sonreía sin sorpresa, convencida como yo de que un encuentro casual era lo menos casual en nuestras vidas, y que la gente que se da citas precisas es la misma que necesita papel rayado para escribirse o que aprieta desde abajo el tubo de dentífrico.Pero ella no estaría ahora en el puente. Su fina cara de translúcida piel se asomaría a viejos portales en el ghetto del Marais, quizá estuviera charlando con una vendedora de papas fritas o comiendo una salchicha caliente en el boulevard de Sebastopol. De todas maneras subí hasta el puente, y la Maga no estaba.


Ahora la Maga no estaba en mi camino, y aunque conocíamos nuestros domicilios, cada hueco de nuestras dos habitaciones de falsos estudiantes en París, cada tarjeta postal abriendo una ventanita Braque o Ghirlandaio o Max Ernst contra las molduras baratas y los papeles chillones, aun así no nos buscaríamos en nuestras casas. Preferíamos encontrarnos en el puente, en la terraza de un café, en un cine-club o agachados junto a un gato en cualquier patio del barrio latino. Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos. Oh Maga, en cada mujer parecida a vos se agolpaba como un silencio ensordecedor, una pausa filosa y cristalina que acababa por derrumbarse tristemente, como un paraguas mojado que se cierra. ..."


Julio Cortázar - Rayuela

11 comentarios:

Anónimo dijo...

im here because of few cents for you. just dropping by.

Anónimo dijo...

Como se llama el blog de Roedor..??

Anónimo dijo...

http://liricogenital.blogspot.com/

Mari Pops dijo...

Para encontrarla Cortazar empezaba por cerrar los ojos.

Tambien necesito buscarla

Anónimo dijo...

Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos. Frase inmejorable si las hay. Como siempre un gusto leerlo Brasil.
Bombóm asesino

Anónimo dijo...

Que tal esto :
" El que se va se lleva su memoria,
su modo de ser rio, de ser aire,
de ser adios y nunca.
Hasta que un dia otro lo para, lo detiene /
y lo reduce a voz, a piel,a superficie/
ofrecida,entregada,mientras dentro de sì/
la oculta soledad aguarda y tiembla."
Rosario Castellanos, una de las poetas preferidas de JC.

morgana dijo...

Este libro lo digerí de grande (hace poco, bah) y obviamente coincido con vos que pocos pueden decir cosas y de inmediato haya cambiado algo dentro nuestro.
Desde el más allá (no morí, ojo), saludos cordiales. M.

Anónimo dijo...

La virtualidad es un medio, nada mas. Para algunos es un fin.

Como medio, entonces puede enviar las cosas mas tremendas y las mas hermosas. No es un mal en sí mismo.

Oliveira y La maga necesitaban perderse. Hhubiera ocurrido lo mismo con banda ancha que sin ella.

Cortázar ... um
Lo que no se puede leer es el cap 7Eso sí nadie lo escribirá como él

Mari Pops dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Roedor dijo...

Cortázar era tan bueno como poeta en prosa, como vulgar como poeta en verso. Ese comienzo te mata, si después de eso no querés leerte el libro entero es porque algo te falla.

Adicionalmente, y salvando las distancias, eso de salir a buscarse sin saber dónde estaba la otra persona, conceptualmente es tan incómodo como desafiante. Casi borgesiano.

La escena de la tabla entre las ventanas con Talita en el medio, la yerba y los clavos, esa es demasiado larga, pero también valdría la pena.

Gracias por hacerme acordar.

brasil dijo...

Esa escena dew la que hablás, motivo que con un amigo a los 15 años, teníamos la ilusión de pararnos en la puerta de su casa en Paris con un paquete de yerba con clavos de regalo, y así obtener una tarde de charla con el.

Cortazar está muerto y no conozco Paris